Herman Añez T.
El 17 de Diciembre se conmemora la muerte del más grande venezolano de todos los tiempos: Simón Bolívar. Su nacimiento fue en Caracas, el 24 de Julio de 1783. Fue el cuarto hijo de los esposos Juan Vicente Bolívar y Ponte y María de la Concepción Palacios y Blanco. Quedó huérfano de padre a los tres años, y de madre a los nueve años de edad. Perteneció a una de las familias más ricas de Caracas, la nobleza agraria, los mantuanos, los grandes cacaos, que derivaron sus bases económicas de la posesión de la tierra, del trabajo agroesclavista.
A los catorce años ingresó a la milicia donde se graduó de sub-teniente. Al año siguiente viajó a España donde se casó con María Teresa del Toro y Alayza, quien murió al año siguiente en Caracas. Regresó a Europa donde estudió idiomas, historia, filosofía y literatura, y junto a Simón Rodríguez y Alejandro de Humboldt analizó la situación política de América. Allá adquirió gran parte de la formación cultural de que hará gala durante toda su vida.
En 1807 regresó a Venezuela y comenzó a conspirar por la independencia de nuestro país; Participó activamente en los sucesos ocurridos antes, durante y después del 19 de Abril de 1810. El 3 de Julio de 1811 pronunció en la Sociedad Patriótica su primer discurso político en el que pide la independencia absoluta y revela su personalidad de líder que ratifica durante el terremoto de 1812.
En 1812 se inicia su carrera militar cuando Francisco de Miranda le encarga la defensa de la plaza de Puerto Cabello, siendo derrotado por las fuerzas comandadas por Monteverde. Después de la pérdida de la Primera República, obtiene pasaporte por intermedio de sus contactos para ir a Curazao y de allí se va a Cartagena de Indias, donde escribe el Manifiesto de Cartagena, donde expone las causas del fracaso de la República y sus ideas políticas.
En 1813, a los 30 años, terminada la campaña admirable, que le abre las puertas de la fama, entra en Caracas, asume la Jefatura Suprema de Venezuela y gobierna según las ideas que venía alimentando. El 14 de octubre de 1813, la Municipalidad de Caracas le otorga el título de Libertador de Venezuela, meses antes, Mérida le había dado el título de Libertador de La Patria y en 1819, el Congreso de Angostura le da el título de Libertador de Colombia.
Al desaparecer la Segunda República, el Libertador se dirige a Nueva Granada a rendirle cuenta al Congreso que fue quien lo autorizó para invadir a Venezuela, pero entró en conflicto con el jefe neogranadino y se embarcó para Jamaica y el 6 de Septiembre de 1815 escribe la Carta de Jamaica, en respuesta a un amigo que le solicitó sus opiniones sobre el ideal independentista; en ella hace un recuento de la Revolución, prevé con visión genial el destino de los países latinoamericanos y concibe la Gran Colombia y el Congreso de Panamá.
Pero es en el Congreso de Angostura, el 15 de Febrero de 1819, donde Simón Bolívar presenta su Mensaje y un Proyecto de Constitución. El Mensaje es un resumen del pensamiento filosófico, político y sociológico de El Libertador y representa una de sus piezas más brillantes; contaba con 36 años de edad.
Después de oírlo, todos reconocieron que al lado del jefe militar aparecía el primer estadista que daba la Revolución. Estaba brillando la estrella de la Nueva República, la Tercera República; de ahí en adelante, habiéndose logrado la independencia de Venezuela el 24 de Junio de 1821, se propondría realizar el gran sueño: la creación de la Gran Colombia como la propuso en el discurso de apertura del Congreso de Angostura, la cual tuvo una duración muy efímera.
Desde la promulgación de la Ley en Angostura, en 1819 y su ratificación en Cúcuta, en 1821, hasta la culminación del proceso separatista, en 1830, apenas transcurrieron 11 y 9 años, respectivamente. Contra su permanencia en el tiempo actuaron causas políticas, sociales y económicas que hicieron inviable el proyecto. Los venezolanos quedaron divididos en dos bandos: los leales a la posición centralista de Bogotá liderada por Simón Bolívar, y los leales a la posición federalista liderada por Páez, movimiento separatista que se conoció con el nombre de La Cosiata.
La Gran Colombia
Bandera de la Gran Colombia
A su regreso triunfal de la campaña del sur, Ecuador, Perú y Bolivia, Bolívar convocó una Convención que se encargaría de reformar la constitución del año 21, la cual se realizó en Ocaña, en su iglesia de San Francisco, en 1828, sin lograr su propósito. Ante tal situación, el Libertador asumió el mando de la República con características dictatoriales, y las medidas que tomó molestaron a tal grado a los afectados que planearon su asesinato fracasando en tal misión.
La Dictadura de Bolívar no pudo detener el proceso de deterioro de la Unión, y en Diciembre de 1829 convocó un Congreso en Bogotá a fin de elaborar una nueva constitución; se denominó Congreso Admirable, se instaló en Enero de 1830, presidido por Antonio José de Sucre y sesionó hasta Mayo del mismo año ante el cual, Simón Bolívar renunció al mando y anunció su retiro de la vida política. Mientras tanto, Páez gana las elecciones para presidente de Venezuela, independiente de España y separada de Colombia.
Al mes siguiente, Junio de 1830, asesinan a Sucre en Berruecos y en Diciembre del mismo año muere Simón Bolívar en la Quinta de San Pedro Alejandrino, en Santa Marta. Murió el 17 de Diciembre de 1830, a la una y siete minutos de la tarde, a la edad de 47 años, 4 meses y 23 días. El doctor Alejandro Próspero Reverand confirma la existencia de tuberculosis, como le ocurrió a su madre, y embalsama su cuerpo.
Los funerales se celebraron en la catedral de Santa Marta donde queda sepultado su cadáver el día 20 y que será trasladado a Caracas, tal como lo manifestó en su testamento. Recibió los sacramentos de parte del obispo de Santa Marta. Con su muerte murió también su gran sueño: la unión de las repúblicas latinoamericanas.